Lo ocurrido ésta madrugada (2.30 a.m. del 29 de marzo de 2018 - jueves santo) a la casa del abogado Martina Cabrera Ramos, ubicado en el Parque Santa Rosa de la ciudad de Huarmey, con la colocación de un explosivo que hizo retumbar la casa, la zona y sus alrededores, despertando a los vecinos del mencionado parque, es una muestra más que la tolerancia está muy lejos de la vida y la costumbre de los huarmeyanos de hoy...
TODOS LOS CAMINOS CONDUCEN A ROMA.


“La violencia es contagiosa” refería el connotado psiquiatra y psicoterapeuta norteamericano Friedrich Hacker en los años 70 y Huarmey en esos años era ajeno a la práctica violenta de convivir como enemigos, salvo algunos casos aislados y esporádicos que se daban entorno al pueblo, con sus pocas calles y su creciente auge poblacional desde los años 50.

Huarmey, hasta los años 90, era un pueblo sumamente tranquilo, donde todos éramos vecinos de saludos y de respeto único a nuestros mayores, vecinos y amigos, de ahí que, cojo la frase de Friedrich Hacker, cuando dice que “la violencia es contagiosa”, si, hemos sido contagiados por los acontecimientos nacionales que enmarcan la agenda noticiosa por parte del periodismo nacional, con sus titulares o primeras planas explosivas de violencia y más violencia, aunque leía en un medio periodístico que, “la violencia forma parte de nuestros ADN”, pero “como seres sociales necesitamos controlar la parte más feroz de nuestra personalidad, esa agresividad que forma parte del ser humano”, recomienda la psiquiatra Lola Morón.

“La maldad forma parte de la condición humana desde que el hombre comenzó a andar erguido”, señalan los expertos. Con ésta afirmación, podemos señalar que la maldad se viene posesionando en la ciudad de Huarmey con mayor intensidad en el ámbito político, ya que los acontecimientos que vamos a describir, ensayamos que tiene mucha relación con algún hecho público que formaron parte, antes de sufrir atentados y/o amenazas de muerte los aludidos.

Hay que recordar que la violencia es la característica de nuestra época actual en la sociedad peruana y Huarmey no es ajeno a todo esto que muestran los medios de comunicación nacional.

Lo ocurrido ésta madrugada (2.30 am del 29 de marzo de 2018 - jueves santo) a la casa del abogado Martina Cabrera Ramos, ubicado en el Parque Santa Rosa de la ciudad de Huarmey, con la colocación de un explosivo que hizo retumbar la casa, la zona y sus alrededores, despertando a los vecinos del mencionado parque, es una muestra más que la tolerancia está muy lejos de la vida y la costumbre de los huarmeyanos de hoy; recordemos que Martin Cabrera Ramos es un perseverante luchador en diversos momentos de la reciente historia huarmeyana, ello significa que sin haber promovido, se ha hecho de enemigos y de críticos por su accionar vehemente, como toda persona publica, tiene críticos y análogos por su línea de pensamiento. La acción contra Martin Cabrera Ramos, no deja de provocar indignación ni hacer que nuestro espíritu no se exaspere, sino al contrario, ligar este acontecimiento a hechos ocurridos entre los años 2015 y 2018, justo durante el periodo de la gestión municipal del alcalde huarmeyano Miguel Ángel Sotelo Llacas y que todos los hechos similares ocurridos en la época señalada, tiene relación con acciones que desarrollaban los ciudadanos en el ámbito político local.

Cuando la solicitud de vacancia contra el actual alcalde huarmeyano Miguel Ángel Sotelo Llacas se hizo público a través de los medios de comunicación y se supo quienes estaban en el grupo de la vacancia y quien era su asesor legal, éste último sufrió un atentado en su domicilio, similar como lo sufrido por Martin Cabrera Ramos; la casa de Tito Egusquiza fue tocado por un explosivo también de madrugada, dañando puertas y ventanas que hasta hoy no se sabe nada de los agresores. El abogado tuvo que renunciar a su intención de ser el asesor legal de la vacancia, dejando al que lideraba la vacancia, el profesor Bernardo Magallanes Pachas.

Bien es sabido por todos, que la actual dirigente vecinal de Puerto Huarmey Madeleine Flores Guerrero, mantuvieron un litigio en el poder judicial, por asuntos de las elecciones vecinales en Puerto Huarmey con el actual alcalde huarmeyano, convirtiéndose la líder porteña en una piedra en el zapato de Gory, de ahí que el alcalde huarmeyano llego a manifestar alguna vez, en una asamblea publica: ”… Por estos días todavía esta reinando, podríamos decir, la anarquía... hay un conflicto fuerte en el Puerto”, el conflicto era porque Madeleine Flores había impugnado las elecciones vecinales. Al pasar los días, Madeleine Flores Guerrero, en una noche, recibió en su casa una amenaza, con pistola en mano de parte de su amenazador.

El profesor Bernardo Magallanes Pachas, delego a su yerno para que ingrese en mesa de partes de la Municipalidad Provincial de Huarmey, un documento sobre la vacancia que venía promoviendo su persona contra el alcalde huarmeyano Miguel Ángel Sotelo Llacas, una vez ingresado el documento, el familiar de Magallanes Pachas se dirigió a su domicilio en el pasaje Virgen del Rosario y antes de llegar a su domicilio, fue interceptado por un hombre que con pistola en mano, le amenazó diciendo que no se mete en el asunto de la vacancia.

Hoy jueves 29 de marzo de 2018, un nuevo atentado remece Huarmey, toda vez que se trata de la casa del abogado Martín Cabrera Ramos, ubicado la Nueva Urbanización, en el Parque Santa Rosa de la ciudad de Huarmey, hecho ocurrido a las 2.30 de la madrugada según ha señalado el abogado y este actuar coincide con la hora y el día (2.30 a.m. y jueves) con el atentado que sufriera Tito Egusquiza el 2016. Mientras que Tito Egusquiza había asumido la defensa legal del proceso de vacancia que se habían presentado al JNE contra el alcalde Miguel Sotelo Llacas, el abogado Martín Cabrera Ramos, “había tomado la defensa del proceso legal del asentamiento humano Buena Villa contra el alcalde de Huarmey, por la lotización por parte de la Municipalidad Provincial del terreno destinado a un campo deportivo para destinarlo a viviendas para sus allegados”, es lo que refiere ancashaldia.com